Este libro empieza con una palabra de colores que se asoma, y termina con el andar a toda marcha de un tren insólito y sorprendente.
En un asombroso viaje por las vías del lenguaje, las palabras se aventuran a armarse y desarmarse. Con la ayuda de la luna, las letras se acomodan y construyen un inquieto tren que vuela por el aire y cambia de forma. Mientras tanto los pasajeros observan por las ventanillas paisajes de cielo y nubes, de árboles y viento, de casas y terrazas: el paisaje de la poesía que habla una lengua de letras en baile.